La Organización Mundial de la Salud respalda el aborto legal como un derecho fundamental de las mujeres y una importante herramienta para proteger su salud y sus derechos reproductivos ante un embarazo no deseado o que ponga en riesgo la vida de la mujer.

En este sentido, cuando una mujer desea interrumpir su embarazo de manera voluntaria, puede ejercer plenamente este derecho sin poner en riesgo su salud a través de dos métodos sencillos y seguros: el aborto clínico o el aborto con píldoras abortivas.

Sin embargo, también existen otros dos tipos de abortos: el aborto espontáneo, y el aborto terapéutico. A continuación, te daremos más detalles sobre cómo funcionan, y bajo qué circunstancias específicas se realiza cada uno de ellos. Veamos.

¿Cuáles son los tipos de abortos?

En esencia, encontramos tres tipos de abortos:

¿De qué se trata el aborto médico con pastillas?

El aborto con píldoras abortivas se realiza mediante la administración de medicamentos que actúan para detener el crecimiento y desarrollo del embarazo temprano. Es un tipo de aborto seguro junto al aborto clínico y menos intrusivo que este.

Es un procedimiento que se realiza, generalmente, mediante a la toma de dos medicamentos por vía oral, que funcionan en conjunto: El Misoprostol (conocido en farmacias como Cytotec) y la mifepristona, cuya función es detener el trabajo de la progesterona, la hormona del embarazo.

Al tomar ambas pastillas dentro del primer trimestre del embarazo, esto causa que el útero se contraiga y expulse el embrión de forma natural, provocando síntomas similares al ciclo menstrual, como sangrado, coágulos y tejido, así como cólicos y calambres abdominales.

La efectividad de la terminación del embarazo con medicamentos es muy alta: entre el 95% y el 98% practicado en embarazos de hasta 9 semanas. Incluso, es posible usar estas pastillas en la semana 10 u 11, aunque es posible que tenga menos efectividad.

En todo caso, no dejes de seguir las recomendaciones de tu médico, pues dependiendo de tu caso en específico, es posible que ocurran algunas complicaciones, como hemorragias, dolores intensos, fiebre o un aborto incompleto.

En esta última circunstancia, a menudo se necesitará de una nueva dosis de Cytotec o la terminación del aborto con un procedimiento quirúrgico.

¿Qué tan seguro es el aborto clínico?

En cuanto al aborto quirúrgico, este se realiza por medio de la técnica de la aspiración o succión del feto. Como podemos ver, es un método más agresivo que el anterior. El procedimiento se realiza generalmente usando una aspiradora manual o una aspiradora de succión que elimina el desarrollo embrionario, las membranas y los tejidos del embarazo.

Se hace uso de anestesia local y generalmente se considera seguro y eficaz cuando se realiza en la primera etapa del embarazo y con un profesional altamente calificado.  La efectividad del aborto quirúrgico se estima alrededor del 98% en el primer trimestre de gestación.  

Se requiere de 1 a 2 semanas de recuperación después del procedimiento antes de realizar actividades físicas muy extenuantes. Además, durante este tiempo es normal que se experimente un poco de sangrado y pequeños calambres.

Aprende Más: Mifepristona y Misoprostol: Preguntas frecuentes sobre el aborto con pastillas

Aborto espontáneo y aborto terapéutico ¿Cuál es la diferencia?

En primer lugar, un aborto es una interrupción natural e involuntaria del embarazo. Puede ocurrir durante los primeros 5 meses de embarazo o antes de que el feto pese 500 gramos. Por lo general, es causado por anomalías en el embrión, malformaciones uterinas, entre otras condiciones de salud de la mujer.  

Mientras que un aborto terapéutico suele tratarse de un aborto inducido en la mujer cuando el embarazo presenta malformaciones fetales letales o de enfermedades graves como algún tipo de cáncer o enfermedades que ponen en peligro el pronóstico vital de la madre. Estas condiciones provocan sangrado y dolor pélvico intenso, síntomas del aborto espontáneo.

En este tipo de complicaciones se realiza un aborto inducido utilizando pastillas para abortar o por medio de una intervención quirúrgica dependiendo de la etapa del embarazo y las condiciones de salud de la paciente.

Como podemos ver, en ambos casos se trata de interrupciones involuntarias del embarazo. Sin embargo, casi siempre se trata de casos aislados o situaciones únicas. Por ejemplo, alrededor del 15% de los embarazos son afectados por un aborto espontáneo, especialmente por la edad de los padres.

También puede originarse por:

¿Cuándo un aborto podría poner en riesgo la vida de la mujer?

Desafortunadamente, también existen otros tipos de abortos considerados como abortos clandestinos que se realizan fuera de un entorno clínico o en hospitales autorizados. Esto sucede con frecuencia en países (como Guatemala) en donde al aborto legal no es un derecho reproductivo.

Si bien casi siempre son realizados con instrumentos médicos, las mujeres que se someten a este tipo de aborto, pueden correr riesgos graves que podrían poner su vida en peligro, ya que a menudo son realizados por personal no calificado y en entornos que no cumplen con la salubridad necesaria.

Todo ello puede producir complicaciones como sangrado abundante o hemorragias, infecciones vaginales, hasta consecuencias más graves como daños en los órganos como intestinos o la vejiga, y en los órganos reproductivos.

Además de los problemas ya mencionados, algunos estudios han demostrado que un aborto ilegal puede afectar seriamente la salud mental y emocional de algunas mujeres, independiente de si se realizó el procedimiento por problemas de salud.

Aprende Más: Mitos del Misoprostol: Desmintiendo Creencias Erróneas

Palabras finales

Para terminar, optar por un aborto seguro es fundamental para proteger la salud y el bienestar de las mujeres que no deseen llevar a término un embarazo no deseado o planificado.

Dentro de las opciones disponibles, el aborto con pastillas se destaca como un método eficaz, seguro y accesible, especialmente en las primeras semanas del embarazo. Además, permite a las pacientes realizar el proceso en la privacidad de sus hogares con absoluta confidencialidad. Como hemos visto, su tasa de éxito es muy alta y los efectos secundarios son generalmente manejables. En caso de cualquier complicación, no dejes de acudir a tu médico para recibir asesoramiento personalizado, pues cada caso es único y requiere de tratamientos específicos acordes a la situación.

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